Una de las revistas señeras en el mundo hispanohablante es sin duda Caras y Caretas. Nacida en ese tumultuoso período entre siglos, con las revoluciones a la espalda y el futuro amplio y prometedor al frente. El 8 de octubre de 1898 se ponía en venta el primer número de Caras y Caretas a 25 centavos. Tras trece números, el precio se redujo a 20 y así quedaría hasta la desaparición de la revista en 1939 tras su primera etapa. Mientras España se buscaba a sí misma, atónita y deprimida ante su largo declive internacional, rematado por la pérdida de Cuba, Puerto Rico y Filipinas, otros, también españoles se embarcaban en una de los proyectos clave del periodismo latinoamericano. Los protagonistas de esta primera etapa de la revista fueron el castellano Eustaquio Pellicer, el andaluz Manuel Mayol, el gallego José María Cao y el entrerriano José Sixto Álvarez (Fray Mocho), secundados por el criollo y expresidente nacido en Montevideo, Bartolito Mitre. Tres de los cinco integrantes del núcleo de Caras y Caretas eran españoles emigrados, dato que no se debería pasar por alto, máxime si recordamos que las revistas ilustradas del XIX en Cuba tuvieron el protagonismo de otro emigrado Víctor Patricio de Landaluce, periodista, dibujante, proto-historietista y pintor que marcó un hito en el despegue de estas publicaciones en la Isla. No me entiendan mal, no se pretende una reivindicación de la españolidad de un medio impreso que daba sus primeros pasos. Tenemos un pensamiento más transnacional. Pero me extraña que en España poco o nada se sepa de estos pioneros, arquetipos de un momento de la historia plagado de proyectos sensacionales que han caído en el más absoluto ostracismo.
Este excelente monográfico, La Tragedia y la Comedia de la Argentina salió a la venta en octubre de 2008 a 30$. Le debo a un buen amigo su compra y envío a la Pérfida Albión. A veces a uno esto del mundo globalizado no le parece más que una vulgar patraña. ¿Por qué no se ha podido vender esta obra en España? Probablemente por la escasa venta que habría tenido. Puñeta.
El monográfico La Tragedia y la Comedia de la Argentina 1898-2008 (María Seoane y Víctor Santa María) es un precioso estudio de esos 110 años del semanario Caras y Caretas. Ilustrado profusamente con las portadas originales de muchos de sus primeros números, propone un recorrido por las cuatro etapas de la revista: 1) 1898-1939; 2) 1951-1955; 3) 1982-1984; 4) 2005-
Hubo otras revistas argentinas anteriores a Caras y Caretas como Don Quijote y El Mosquito pero estas dos últimas no consiguieron dar ese paso fundamental hacia la profesionalización del periodismo ilustrado, tomando como modelos formales las revistas europeas de la época como la alemana Simplicissimus. Sin embargo, como menciona la profesora Geraldine Rogers, la mayor influencia provenía de los Estados Unidos donde la fórmula de contenido misceláneo, se combinó con un precio asequible para el lector y el efecto atractivo de las ilustraciones. La era de la imagen llamaba a la puerta.
La revista retrató la llega masiva de inmigrantes en reportajes fotográficos de alta factura. O la construcción del Congreso de la Nación, sin olvidar el Obelisco santo y seña bonaerense. Se dedicaron especiales a la Gran Guerra y se apoyó sin ambages el primero de una larga serie de golpes de estado en la Argentina en 1930.
Caras y Caretas se vendía al mismo precio que un paquete de cigarrillos y la propia revista lanzó su marca de pitillos. La publicidad, que con el discurrir del tiempo fue ocupando gradualmente más espacio en la revista (25% en 1900, 38% en 1910, 36% en 1931) se convirtió en otro de sus atractivos en una constante fuente de ingresos que permitió internacionalizar su venta a toda Latinoamérica, llegando incluso a los Estado Unidos. Las ventas acompañaban y si en 1904 se registraron tiradas superiores a los 80.000 ejemplares en 1912 llegaban a las 111.000 copias.
¿Y la historieta?
De sobra es sabido que fue Caras y Caretas la pionera en introducir historietas en los medios impresos argentinos y tal vez en toda Latinoamérica con el permiso de Angelo Agostini. Las Aventuras de Viruta y Chicharrón, obra del (¡albricias!) también español Manuel Redondo vieron la luz el 27 de abril de 1912. Un plagio a todas luces de la serie norteamericana de George Mc Manus Spare Ribs and Gravy, que llegaba a Argentina hasta el estallido de la Primera Guerra Mundial, pero ante la popularidad de la historieta se decidió continuar…hasta la década de los 30. en 1912 aparece otra de las ancianas historietas argentinas: Don Goyo Sarrasqueta y Obes, que tras su primer año (dibujada por Alonso) quedaría a cargo de Redondo. Ya en la década de los 30 aparece la tira Las desventuras de Maneco, de Linage, en una temprana representación de la viveza porteña. La frase con la que se remataban las aventuras era “¡Sonaste, Maneco!”, que se hizo muy popular hasta mediados del siglo XX. Los aficionados a la historieta reconocerán en esa frase el título de una excelente revista digital: ¡Sonaste Maneco!
Hubo otras revistas argentinas anteriores a Caras y Caretas como Don Quijote y El Mosquito pero estas dos últimas no consiguieron dar ese paso fundamental hacia la profesionalización del periodismo ilustrado, tomando como modelos formales las revistas europeas de la época como la alemana Simplicissimus. Sin embargo, como menciona la profesora Geraldine Rogers, la mayor influencia provenía de los Estados Unidos donde la fórmula de contenido misceláneo, se combinó con un precio asequible para el lector y el efecto atractivo de las ilustraciones. La era de la imagen llamaba a la puerta.
La revista retrató la llega masiva de inmigrantes en reportajes fotográficos de alta factura. O la construcción del Congreso de la Nación, sin olvidar el Obelisco santo y seña bonaerense. Se dedicaron especiales a la Gran Guerra y se apoyó sin ambages el primero de una larga serie de golpes de estado en la Argentina en 1930.
Caras y Caretas se vendía al mismo precio que un paquete de cigarrillos y la propia revista lanzó su marca de pitillos. La publicidad, que con el discurrir del tiempo fue ocupando gradualmente más espacio en la revista (25% en 1900, 38% en 1910, 36% en 1931) se convirtió en otro de sus atractivos en una constante fuente de ingresos que permitió internacionalizar su venta a toda Latinoamérica, llegando incluso a los Estado Unidos. Las ventas acompañaban y si en 1904 se registraron tiradas superiores a los 80.000 ejemplares en 1912 llegaban a las 111.000 copias.
¿Y la historieta?
De sobra es sabido que fue Caras y Caretas la pionera en introducir historietas en los medios impresos argentinos y tal vez en toda Latinoamérica con el permiso de Angelo Agostini. Las Aventuras de Viruta y Chicharrón, obra del (¡albricias!) también español Manuel Redondo vieron la luz el 27 de abril de 1912. Un plagio a todas luces de la serie norteamericana de George Mc Manus Spare Ribs and Gravy, que llegaba a Argentina hasta el estallido de la Primera Guerra Mundial, pero ante la popularidad de la historieta se decidió continuar…hasta la década de los 30. en 1912 aparece otra de las ancianas historietas argentinas: Don Goyo Sarrasqueta y Obes, que tras su primer año (dibujada por Alonso) quedaría a cargo de Redondo. Ya en la década de los 30 aparece la tira Las desventuras de Maneco, de Linage, en una temprana representación de la viveza porteña. La frase con la que se remataban las aventuras era “¡Sonaste, Maneco!”, que se hizo muy popular hasta mediados del siglo XX. Los aficionados a la historieta reconocerán en esa frase el título de una excelente revista digital: ¡Sonaste Maneco!
Este excelente monográfico, La Tragedia y la Comedia de la Argentina salió a la venta en octubre de 2008 a 30$. Le debo a un buen amigo su compra y envío a la Pérfida Albión. A veces a uno esto del mundo globalizado no le parece más que una vulgar patraña. ¿Por qué no se ha podido vender esta obra en España? Probablemente por la escasa venta que habría tenido. Puñeta.
10 comentarios:
Estimado JORGE:
Excelente reseña sobre esta publicación.
Creo que es acertado pensar que el origen y desarrollo de las revistas ilustradas fue impulsado por artistas y artesanos españoles.
No solo trajeron sus conocimientos y habilidades artísticas, también su carácter tesonero inculcó el valor de la tenacidad y la persistencia en las publicaciones, y alimentó vocaciones locales.
Un abrazo y hasta siempre.
Bueno, por alusiones... De nada, hombre. A mandar. Espero que te esté sirviendo de algo.
Por cierto, que en mayo iremos a la conferencia de Canadá sobre Cuba y según me dijo Lori, Toni Kapcia estará allí. Si necesitas algo de aquí, se lo podemos hacer llegar a él y que él te lo lleve.
Estimado Rotebor,
Me alegro que le haya gustado. Todavía está por escribir la historia de esos emprendedores que fuera de su tierra contribuyeron de manera decisiva al desarrollo del periodismo y la historieta en varios lugares de Latinoamérica.
Un abrazo.
Alberto,
Que muchas gracias de nuevo por conseguirme el libro. Como ya he escrito, un aporte fundamental para entender esta publicación argentina.
De lo de Canadá, déjame pensarlo...
Un abrazo y besitos a sus niñas.
Hola, tengo en poder algunas revistas de caras y caretas:
- diciembre 1932,
- junio 1933,
- octubre 1933,
- enero 1934,
- octubre 1951,
- diciembre 1952,
- mayo 1953,
- octubre 1954,
- noviembre 1954,
- febrero 1955,
- abril 155.
Si te interesa alguna en especial me mandas un mail y te puedo mandar fotos para que veas el estado de las mismas.
Como así también cuanto estarías dispuesto a abonar por las mismas.
Saludos.
Flavia (mail: flavia_moar@yahoo.com.ar)
Hola Jorge, sorprendido y feliz por su maravillosa vision acerca de la recordada "madre de todas las revistas" argentinas. Me gustaria hacerle llegar un libro recordatorio del genial Jose Maria Cao, inolvidable pluma e insignia brillante del genesis de la historieta en estas tierras. Lo tengo en un archivo PDF, si usted lo desea, solo es cuestion de decirme donde lo envio. Un placer conocerlo. Marc Sinclair. Buenos Aires, Republica Argentina.
¿De dónde sale que Viruta y Chicharrón fue la primera historieta publicada en Argentina? ¿Y que se publicó hasta la década del '30?
No es cierto, y se repite en artículos y en libros como este. Incomprensibles estos historiadores que no se ocupan de verificar en las fuentes documentales lo que afirman, y luego se reproduce sin fin. No es culpa del que subió esta info al blog, sino de los que lanzaron ese libro sobre una revista que es evidente, desconocen.
Jorge...soy de Neuquén y estoy haciendo un trabajo sobre Fray Mocho (José S. Alvarez) me vendría muy bien ese trabajo monográfico que mencionabas. Podrías decirme como lo consigo??? es muy importante. El trabajo al que me refiero es: La Tragedia y la Comedia de la Argentina 1898-2008 (María Seoane y Víctor Santa María)...te dejo mi e-mail para estar en contacto feratuztra@hotmail.com
Hola, me gustaría saber los nombres de los fotógrafos que participaban de la revista entre los años 1900 y 1930. Hay muy poco material sobre esto y me gustría saber si uds. me pueden ayudar. Mi mail es nadia.tranguera@gmail.com.
Gracias!
Hola Jorge. estoy haciendo un trabajo y quisiera citar algunas partes de tu nota del blog...sobre todo cuando mencionas las revistas previas a 1989 y cuando referis que caras y caretas apoyó el golpe de 1930...lo escribiste vos?? quisiera hacer la cita correctamente. Te dejo mi mail para una posible respuesta: sg_mdq@hotmail.com. Gracias
Vendo 30 tomos de la colección de revistas Caras y Caretas. Desde el año 1905 al 1925 y dos tomos del libro La Reforma del año 1902 y el año 1912..año completos. Muy buen estado....3548591933
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