miércoles, 12 de septiembre de 2007

Don Quijote en los tebeos

En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho tiempo que vivía un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor. Una olla de algo más de vaca que carnero, salpicón las más noches, duelos y quebrantos los sábados, lentejas los viernes, algún palomino de añadidura los domingos, consumían las tres partes de su hacienda.

Éste es el archiconocido comienzo de una obra magna de la literatura universal, del GRAN libro de la literatura española, de la primera novela en sentido moderno, del mito de Don Quijote y el quijotismo, pero también de la noble figura de Sancho, realista donde los haya que se va contagiando de las locuras de su señor y viceversa. Las traducciones de Don Quijote de la Mancha han sido múltiples y las versiones tanto en cine, como en teatro también. El noveno arte no ha sido un extraño al texto de Cervantes y también se han sucedido las versiones de la obra en historieta.
A raíz del cuarto centenario de la publicación de la primera parte de Don Quijote (1605-2005), la Universidad de Castilla-La Mancha impulsó la exposición “Don Quijote en los tebeos” para mostrar las diferentes versiones en historieta que se han realizado a lo largo del tiempo. El catálogo de esa exposición está a la venta en librerías universitarias por 6 euros y contiene ejemplos fantásticos de adaptación de la novela al tebeo. Pero además hay también curiosidades y rarezas como la litografía que realizó la Imagerie d´Epinal en Francia para el mercado norteamericano: “Forma parte de un conjunto de 60 litografías divididas en 16 cuadros acompañados por un breve texto al pie, mediante los que se narran diversas historias.” (Don Quijote en, 14)
El ejemplo es de 1888, publicado por Humoristic Publishing Co. en Kansas City (Missouri).


En España, la primera publicación similar a la americana, sería la aleluya o auca que se publicó en la década de 1870 a cargo del editor Antonio Bosch. Consta únicamente de una hoja y se llama Historia del Nuevo D. Quijote. Parece que es una sátira política muy al estilo de la época, aunque no se sabe con certeza a quien se pretendía parodiar.



Y desde aquí las versiones se suman, diferentes, curiosas, fieles o de libre interpretación. En este sentido el catálogo publicado de la exposición es una obra muy peculiar porque muestra ejemplos de lo más pintorescos. La más antigua publicación en España sobre Don Quijote y con título independiente, sin pertenecer a una revista de contenido variado sería Don Quijote de la Mancha (Las grandes aventuras), en edición facsímil por Hispano Americana de Ediciones en 1940.

La conocida revista Tintín también dedicó varios números a nuestro caballero (en concreto, 31) hacia el año 1949 y el “Centro de Estudios de Castilla- La Mancha” (CECLM) contiene un buen número de ejemplares.
Peculiar es también la presencia del caballero en el número 62 del cuaderno Hazañas Bélicas de Toray en 1958. El protagonista, Johnny Comando se inspira en un episodio de la novela para luchar y vencer a los norcoreanos en una acción de guerra.

Por supuesto, también tenemos la versión Walt Disney. Y la versión Ibáñez, con Mortadelo y Filemón.

Finalmente, entre las muchas versiones que hay en el catálogo, me quedo con la que hiciera el maestro Will Eisner en el año 2000: The Last knight: an introduction to Don Quixote. Son 32 páginas en las que aparecen algunas de las aventuras más memorables de Don Quijote y Sancho como el episodio de lo molinos, el “ejército” de ovejas, la liberación de los galeotes, el episodio del león… Si lo tomamos como una introducción, tal y como dice el título, es una obra a tener en cuenta, aunque he de confesar que me decepcionó cuando lo leí. Supongo que me hice demasiadas ilusiones, imaginando pasajes del libro dibujados por el maestro. Lo que hizo Eisner, con acierto, fue seleccionar algunas escenas para mostrar, eso, una introducción al mito. Y es que un libro tan grande (en ambos sentidos de la palabra), requería una selección para adaptarlo al cómic porque de lo contrario sería hubera sido una tarea quijotesca.
PD. He tenido algunos problemillas para subir las imágenes. Bufff, la informática y yo.



3 comentarios:

Dr. Banting dijo...

Saludos de nuevo.

Hacia tiempo que no visitaba tu blog. Las vacaciones, que le atontan a uno.

Espero que el Sr. Alvaro Pons no se cabrerara con mis opiniones blanco/negro (te adoro/te detesto) pero es que a mi con los comics me pasa como con los libros (o las pelis o los discos o cualquier manifestación artística), o me parecen cojonudos o son una puta birria.

Es coña. Reconozco que hay cosas buenas que posiblemente no me gusten (o no entienda, soy así de corto).

Al turrón. El Quijote de Eisner me parece una obra menor, más bien crepuscular. Con ello no quiero decir que Eisner estaba gagá en sus ultimos años, que va! Ahi tiene "La Conspiración", su obra postuma que es un pedazo de comic!

Por cierto, estoy ENGANCHADO COMO NUNCA LO HE ESTADO A UN COMIC, con "100 Balas" de Azzarello y Risso. Es simplemente cojonudo. Y pensar que los conocí por "Ciudad Rota" de Batman y no por este pedazo de obra de arte...Planeta de Agostini los esta reeditando mensualmente. Ya van por el 15.

Un saludo.

Jorge dijo...

Hombre Quique!! Ya pensaba que os habíais quedado a vivir por el Canadá. Qué tal está aquello?

Las opiniones cada las tiene y las expresa como le da la gana. Yo, personalmente, me lo pasé muy bien con aquella discusión sobre los 80.

Respecto a "100 balas", ya me dijiste que era muy bueno. Lo he estado viendo y sí que parece muy interesante. Además, como dices, es una serie larga pero larga. No sé si empezarla en inglés o pasarme a la edición en español. ya veremos...

Sobre Eisner, pues sí, una obra menor. Esperaba encontrarme algo más. Oye y no he leído "La Conspiración". Tantas obras, tantas por leer!

Tron dijo...

Yo estoy leyendo una versión en cómic del Don Quijote hecha con la técnica de dibujo sobre foto, editada originalmente por la Ed. Naranco, y me está gustando mucho. La tienen en algunas bibliotecas públicas y me parece muy digna de leer, por su respeto a la obra original (aunque lógicamente resumen cosas) y por el trabajón que se dieron para fotografiar todos los escenarios que salen en cada una de las viñetas.